Epitelios de revestimiento. Epitelio estratificado

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ÓRGANO: Esófago (humano). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Esófago (H/E) (2x). Segmento de un corte transversal de esófago en el que, revistiendo su superficie interna, se observa un epitelio (E) plano estratificado no queratinizado (también llamado ''epitelio malpigiano'' o, más raramente, ''epitelio mucoso''). Descansa directamente sobre un tejido conjuntivo (C), más allá del cual se aprecian las demás capas, tanto musculares (M) como conjuntivas (Co), del órgano.
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Esófago (H/E) (4x). El epitelio malpigiano (E) está constituido por múltiples capas de células, pero únicamente las hileras más superficiales son células aplanadas. No presenta queratinización, es decir, las células epiteliales, llamadas ''queratinocitos'', no llegan a diferenciarse hacia escamas córneas o corneocitos. En la imagen se observa cómo el límite con el tejido conjuntivo es algo irregular, con papilas conjuntivas (flechas) que a veces se seccionan transversal u oblicuamente y aparecen como islotes de conjuntivo (asteriscos) aparentemente aislados en el seno del epitelio.
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Esófago (H/E) (10x). En el epitelio malpigiano se pueden distinguir dos estratos: un ''estrato basal o germinativo'' (B), constituido por una única hilera de células apoyadas sobre la membrana basal que separa el epitelio del tejido conjuntivo (C) subyacente, y un ''estrato espinoso'' (E), formado por varias capas de células que se van aplanando progresivamente y acaban por desprenderse (flecha) en la superficie del epitelio. (Papila conjuntiva: P. Tejido muscular: M).
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Esófago (H/E) (20x). El estrato basal o germinativo (B) está formado por una sola hilera de células cuyos núcleos se sitúan muy próximos entre sí, adoptando una disposición en ''empalizada''. Las células epiteliales del estrato espinoso (E), inicialmente poliédricas, se van aplanando conforme se asciende en el epitelio hasta acabar por desprenderse (flecha) en su superficie. (Tejido conjuntivo: C. Papila conjuntiva: P).
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Esófago (H/E) (40x). Las células epiteliales del estrato basal (B) son cúbicas altas o prismáticas bajas, y sus núcleos, ovalados, se disponen muy próximos entre sí y con su eje mayor perpendicular al plano de la membrana basal. Las células epiteliales del estrato espinoso (E) son poliédricas, con núcleos redondeados. Estas células van aumentando progresivamente de volumen al ascender en el epitelio, lo que se traduce en que los núcleos aparecen más separados unos de otros. Los escasos núcleos pequeños y densos (flechas) que aparecen entre las células epiteliales son linfocitos que infiltran el epitelio. (Tejido conjuntivo: C).
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Esófago (H/E) (40x). En las zonas profundas (Ep) del epitelio las células del estrato espinoso son poliédricas, con núcleos redondeados. Conforme nos acercamos a las regiones más superficiales se observa cómo las células epiteliales se van aplanando progresivamente, de modo que en las últimas capas (Es) son bastante planas, con núcleos aplastados cuyo eje mayor es paralelo a la superficie del epitelio. En la parte inferior de la imagen se ve el extremo de una papila conjuntiva (C), rodeada por células epiteliales del estrato basal (B).
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Esófago (H/E) (100x). Células epiteliales del estrato basal o germinativo (B), formando una única hilera. Por encima de ellas, hacia la derecha de la imagen, se ven las células más profundas del estrato espinoso (E). A este aumento pueden observarse, en algunas zonas, las típicas ''espinas'' (flecha), características de este estrato. (Tejido conjuntivo: C).
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Esófago (H/E) (100x). Las células del estrato espinoso se van aplanando progresivamente conforme ascienden en el epitelio. Siempre conservan el núcleo (flecha), que es de forma aplanada en las células epiteliales más cercanas a la luz del órgano, disponiéndose con su eje mayor paralelo a la superficie externa del epitelio.
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ÓRGANO: Piel (gruesa) (humana). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Piel gruesa (H/E) (2x). La epidermis (E) de la piel está constituida por un epitelio plano estratificado queratinizado (también llamado ''ortoqueratinizado''), que descansa sobre un tejido conjuntivo (dermis) (D). La imagen corresponde a un corte de ''piel gruesa'' (la que aparece en palmas de las manos y plantas de los pies), cuya epidermis está muy engrosada, especialmente el estrato córneo (C). El límite entre epidermis y dermis es muy irregular, distinguiéndose unas ''crestas epidérmicas'' (flechas azules) y unas ''papilas dérmicas'' (flechas rojas). (Glándulas sudoríparas: S. Agregados de adipocitos: A).
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Piel gruesa (H/E) (4x). El epitelio plano estratificado queratinizado (E) está constituido por múltiples capas de células que se aplanan progresivamente al ascender en el epitelio. Las células epiteliales (queratinocitos) experimentan un proceso gradual de diferenciación (“queratinización”) que las convierte en elementos anucleados denominados “escamas córneas” o “corneocitos”. En este tipo de epitelio, y en general en los epitelios planos estratificados, existen otros tipos celulares, escasos, que no sufren queratinización y son muy difíciles de visualizar con (H/E) (melanocitos, células de Merkel y células de Langerhans).
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Piel gruesa (H/E) (10x). En el epitelio plano estratificado queratinizado pueden distinguirse varios estratos, que desde la profundidad a la superficie son los siguientes: estrato basal o germinativo (punta de flecha), estrato espinoso (E), estrato granuloso (flecha azul) y estrato córneo (C). Sólo en la epidermis de la piel gruesa se describe un quinto estrato, entre el granuloso y el córneo: el estrato lúcido (flecha roja). Los islotes de tejido conjuntivo que aparecen aparentemente aislados en el interior del estrato espinoso corresponden a secciones transversales de papilas dérmicas (P). (Cresta epitelial: Ce).
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Piel gruesa H/E (20x). En el epitelio plano estratificado queratinizado pueden distinguirse varios estratos, que desde la profundidad a la superficie son los siguientes: estrato basal o germinativo (B), estrato espinoso (E), estrato granuloso (G) y estrato córneo (C). Sólo en la epidermis de la piel gruesa se describe un quinto estrato, entre el granuloso y el córneo: el estrato lúcido (flecha), el cual tampoco posee núcleos, pero se tiñe menos que el estrato córneo. (Dermis: D).
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Piel gruesa H/E (40x). El estrato basal o germinativo (B) consta de una sola hilera de células cuboideas altas o prismáticas bajas, con núcleos ovoideos de eje mayor perpendicular a la membrana basal. Por encima se sitúa el estrato espinoso (E), grueso, con múltiples capas de células poliédricas de núcleos redondeados. Más arriba encontramos el estrato granuloso (G), delgado, con dos o tres capas de células aplanadas llenas de gránulos de quératohialina (muy basófilos). En la parte superior de la imagen vemos una pequeña zona del estrato lúcido/córneo (C), muy eosinófilo, que no posee núcleos. (Dermis: D).
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Piel gruesa (H/E) (100x). Imagen a gran aumento de un epitelio plano estratificado queratinizado en el que se observa la porción más superficial del estrato espinoso (E), el estrato granuloso (G) y una pequeña zona del estrato lúcido/córneo (C). Las células del estrato espinoso, al ascender en el epitelio, presentan una eosinofilia cada vez más acusada debido a la acumulación de tonofibrillas. Entre estas células se aprecian espacios intercelulares amplios y pálidos, con las típicas ''espinas'' (flechas). En el estrato granuloso destaca la intensa basofilia de los gránulos de quératohialina (asterisco).
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Piel gruesa (H/E) (100x). Porción profunda del estrato espinoso (E) y estrato basal o germinativo (B). Sobre todo entre las células poliédricas del estrato espinoso se observan espacios intercelulares amplios y pálidos, surcados por innumerables ''espinas'' (flechas) orientadas perpendicularmente a la superficie celular. (Dermis: D).
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ÓRGANO: Piel (gruesa) (humana). TÉCNICA: Hematoxilina fosfotúngstica (PTAH).
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Piel gruesa (PTAH) (2x). Imagen a bajo aumento de un corte de ''piel gruesa''. Se observa una epidermis (E) constituida por un epitelio plano estratificado queratinizado, que descansa sobre un tejido conjuntivo (dermis) (D). Obsérvese el gran desarrollo del estrato córneo (C), así como la marcada irregularidad del límite dermo-epidérmico. (Glándulas sudoríparas: S. Agregados de adipocitos: A).
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Piel gruesa (PTAH) (10x). Con esta técnica, aunque con menos claridad que con H/E, también es posible distinguir los estratos del epitelio plano estratificado queratinizado, que desde la profundidad a la superficie son los siguientes: estrato basal o germinativo (flecha azul), estrato espinoso (E), estrato granuloso (flecha roja), estrato lúcido (L) y estrato córneo (C). Los islotes de tejido conjuntivo (asteriscos) que aparecen aparentemente aislados en el interior del estrato espinoso corresponden a secciones transversales de papilas dérmicas (P). (Cresta epitelial: Ce).
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Piel gruesa (PTAH) (20x). Epitelio plano estratificado queratinizado en el que se observan los estratos: basal o germinativo (B), espinoso (E), granuloso (G), lúcido (L) y córneo (C). En el tejido conjuntivo de la dermis se aprecian, teñidos de rojo, haces ondulados de fibras colágenas (asterisco).
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Piel gruesa (PTAH) (40x). En el estrato espinoso, a mayores aumentos, se ven numerosos haces de tonofibrillas (flechas) teñidas de azul, discurriendo por el citoplasma de las células epiteliales. (Estrato basal: B. Estrato espinoso: E. Estrato granuloso: G. Estrato lúcido: L. Estrato córneo: C. Dermis: D).
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Piel gruesa (PTAH) (100x). Células del estrato espinoso a gran aumento. Los espacios intercelulares son amplios y pálidos, y en ellos aparecen innumerables ''espinas'' que parecen unir unas células con otras. A veces, en el centro de cada espina se ve un pequeño engrosamiento más teñido (nódulo de Bizzozero) (flecha azul), que es donde se sitúa el desmosoma. Los haces de tonofibrillas (asterisco) que discurren por el citoplasma de las células epiteliales a menudo se dirigen hacia las espinas, e incluso dan la falsa impresión de ''pasar de una célula a otra'' (flecha roja).
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Piel gruesa (PTAH) (100x). Células del estrato espinoso a gran aumento. Los espacios intercelulares son amplios y pálidos, y en ellos aparecen innumerables ''espinas'' que parecen unir unas células con otras. A veces, en el centro de cada espina se ve un pequeño engrosamiento más teñido (nódulo de Bizzozero) (flecha), que es donde se sitúa el desmosoma. Se observan también haces de tonofibrillas (asterisco) que discurren por el citoplasma de las células epiteliales y tienden a converger hacia las espinas.
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ÓRGANO: Piel (fina) (humana). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Piel fina (H/E) (4x). La epidermis (E) de la piel está constituida por un epitelio plano estratificado queratinizado (también llamado "ortoqueratinizado"), que se apoya sobre un tejido conjuntivo (dermis) (D). La imagen corresponde a un corte de "piel fina" humana, cuya epidermis es mucho más delgada que la de la "piel gruesa" (compárese con las preparaciones anteriores).
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Piel fina (H/E) (10x). En la piel fina, el epitelio plano estratificado queratinizado de la epidermis posee los mismos estratos que en la piel gruesa, excepto el estrato lúcido. Desde la profundidad a la superficie son, por tanto: estrato basal o germinativo (flecha azul), estrato espinoso (E), estrato granuloso (flecha roja) y estrato córneo (C). La depresión redondeada (asterisco) de la superficie cutánea ocupada por escamas córneas puede corresponder a una sección tangencial del orificio de desembocadura de un folículo pilo-sebáceo, del cual se observa también un corte transversal (P) más profundamente, en plena dermis.
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Piel fina (H/E) (20x). Pueden observarse aquí los cuatro estratos del epitelio plano estratificado queratinizado: basal o germinativo (B), espinoso (E), granuloso (G) y córneo (C). No existe estrato lúcido. Es el espesor más pequeño del estrato espinoso y, especialmente, del estrato córneo, la causa del menor grosor del epitelio en la epidermis de la piel fina en comparación con la piel gruesa. Los pequeños orificios (flecha) que aparecen en el seno de la epidermis, en la parte inferior de la imagen, corresponden a la porción intraepidérmica del conducto excretor de una glándula sudorípara ecrina. (Dermis: D).
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Piel fina (H/E) (40x). En la epidermis de la piel fina, el estrato basal (B) lo forma una única hilera de células cuboideas altas o prismáticas bajas, con núcleos ovoideos. Por encima se sitúa el estrato espinoso (E), con entre tres y cinco capas de células poliédricas de núcleos redondeados. Más hacia la superficie encontramos el estrato granuloso (G), poco desarrollado, con aproximadamente dos capas de células aplanadas llenas de gránulos de quératohialina (muy basófilos). Superficialmente se localiza el estrato córneo (C), sin núcleos celulares, delgado, que aparece en la imagen parcialmente desprendido. (Dermis: D).
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ÓRGANO: Esófago (conejo). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Esófago de conejo (H/E) (2x). Imagen a bajo aumento de una sección transversal de un esófago de conejo. Está revestido por un epitelio plano estratificado paraqueratinizado (flecha).
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Esófago de conejo (H/E) (4x). El epitelio plano estratificado paraqueratinizado (o con "paraqueratosis") se diferencia del epitelio plano estratificado queratinizado habitual (llamado también "ortoqueratinizado" o con "ortoqueratosis") en que el estrato granuloso está muy poco desarrollado o ausente, y también y sobre todo, en que los corneocitos del estrato córneo conservan el núcleo. En la especie humana aparece en muy pocos lugares (encías y paladar duro). En la imagen lo vemos revistiendo la superficie interna de un esófago de conejo. (Epitelio paraqueratinizado: E).
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Esófago de conejo (H/E) (10x). A este aumento ya se puede observar, en el epitelio, una estrecha franja eosinófila en su parte más superficial, cercana a la luz del órgano (L). Se trata del estrato córneo (flecha), cuyos corneocitos han conservado el núcleo celular, característica fundamental del epitelio plano estratificado paraqueratinizado.
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Esófago de conejo (H/E) (20x). Epitelio plano estratificado paraqueratinizado. Posee los siguientes estratos, empezando por el más profundo: estrato basal o germinativo (B), estrato espinoso (E) y estrato córneo (C). Obsérvese la ausencia de estrato granuloso y la presencia de núcleos celulares en el estrato córneo.
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Esófago de conejo (H/E) (40x). En el estrato córneo (C) de un epitelio plano estratificado paraqueratinizado los corneocitos conservan el núcleo. Estos núcleos (flecha) son de forma alargada y poseen una cromatina muy densa. No se detecta estrato granuloso. Al igual que en otros epitelios planos estratificados, tanto en el malpigiano como en el queratinizado ("ortoqueratinizado"), los queratinocitos se van aplanando conforme ascienden en el epitelio, hecho fácilmente comprobable observando cómo cambia la forma y orientación de sus núcleos. (Estrato basal: B. Estrato espinoso: E. Tejido conjuntivo: Tc).
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ÓRGANO: Piel (gruesa) (humana). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Piel gruesa (H/E) (4x). En pocos lugares del organismo humano se puede encontrar un epitelio cúbico estratificado. Se trata de un epitelio que habitualmente sólo tiene dos capas celulares y en tal caso se denomina epitelio cúbico biestratificado. Un ejemplo típico de este epitelio lo encontramos constituyendo la porción intradérmica del conducto excretor (flecha) de las glándulas sudoríparas ecrinas de la piel, las cuales son muy abundantes en la piel gruesa. En esta imagen a bajo aumento vemos un corte de piel gruesa humana. Destaca el enorme desarrollo del estrato córneo (asterisco) de la epidermis. (Dermis: D).
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Piel gruesa (H/E) (10x). La porción secretora de las glándulas sudoríparas ecrinas (no se muestra en la imagen) tiene una forma tubular enrollada, sin ramificarse, y se sitúa en la parte profunda de la dermis. Se continúa con un conducto excretor (flecha azul) también no ramificado, que asciende por la dermis en forma de tirabuzón, por lo que varias veces entra y sale del plano de un mismo corte. Se trata de la parte intradérmica del conducto excretor, constituida por un epitelio cúbico biestratificado. A partir de su desembocadura (flecha roja) en la epidermis es ya la parte intraepidérmica del conducto. (Vasos: V).
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Piel gruesa (H/E) (10x). El conducto excretor (flechas) de la glándula sudorípara ecrina asciende por la dermis en forma de tirabuzón, por lo que entra y sale del plano de corte en varias ocasiones. Está constituido por un epitelio cúbico biestratificado (las dos capas celulares tienen forma cúbica) que delimita una pequeña luz. (Adipocitos uniloculares: A. Vasos sanguíneos: V. Tejido conjuntivo de la dermis: C).
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Piel gruesa (H/E) (20x). El conducto excretor de la glándula sudorípara ecrina asciende por la dermis en forma de tirabuzón, por lo que a menudo entra y sale del plano de corte. En esta imagen, mayor aumento de la anterior, se observan claramente tramos seccionados longitudinal u oblicuamente (flecha azul) y otros de modo transversal (flecha roja). El epitelio de revestimiento del conducto es cúbico biestratificado y delimita una pequeña luz. (Adipocitos uniloculares: A. Vasos sanguíneos: V. Tejido conjuntivo de la dermis: C).
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Piel gruesa (H/E) (40x). El conducto excretor de la glándula sudorípara ecrina entra y sale del plano de corte varias veces. Está tapizado por un epitelio de revestimiento cúbico biestratificado (flecha azul), constituido por dos hileras de células de núcleos redondeados. Es característico observar una densificación eosinófila (flecha roja) en los citoplasmas apicales de las células epiteliales que están delimitando la pequeña luz del conducto. (Adipocitos uniloculares: A. Vasos sanguíneos: V. Tejido conjuntivo de la dermis: C).
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Piel gruesa (H/E) (100x). Vista a gran aumento de una sección, perfectamente transversal, de la porción intradérmica del conducto excretor de una glándula sudorípara ecrina. El epitelio de revestimiento (E) es cúbico biestratificado, y delimita una pequeña luz central (flecha azul) que aparece contorneada por una densificación eosinófila (flecha roja) del citoplasma apical de las células epiteliales que contactan directamente con la luz. Por fuera del epitelio, separándolo del tejido conjuntivo, se llega a ver la membrana basal (punta de flecha). (Fibras colágenas del tejido conjuntivo de la dermis: C).
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ÓRGANO: Glándula submaxilar (humana). TÉCNICA: Hematoxilina-Eosina (H/E).
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Glándula submaxilar (H/E) (2x). Hay pocos lugares en el organismo humano donde pueda encontrarse un epitelio prismático estratificado. Se trata de un epitelio con pocas capas celulares, dos o a lo sumo tres, y sólo las células de la hilera más superficial son de forma prismática (las células situadas más profundamente son cuboideas). Vemos aquí un conducto excretor grande (asterisco) de una glándula submaxilar humana, situado en un amplio tabique conjuntivo (Tc). Está tapizado interiormente por este tipo de epitelio.
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Glándula submaxilar (H/E) (4x). Sección longitudinal de un conducto excretor de gran calibre de la glándula submaxilar humana. Está revestido por un epitelio prismático estratificado (flecha). (Luz del conducto: L. Tejido conjuntivo: C. Adipocitos: A).
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Glándula submaxilar (H/E) (10x). Epitelio prismático estratificado (E) que reviste la superficie interna de un conducto excretor de gran calibre de la glándula submaxilar humana. (Tejido conjuntivo: C. Adipocitos: A).
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Glándula submaxilar (H/E) (20x). A mayor aumento se comprueba fácilmente que este epitelio prismático estratificado (E) consta de dos (en alguna zona puntual tres) capas celulares. Sólo la hilera superficial de células epiteliales es de forma prismática. El material que ocupa parcialmente la luz del conducto corresponde a restos de secreción salival (asterisco). (Tejido conjuntivo: C).
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Glándula submaxilar (H/E) (40x). Imagen a gran aumento en la que se aprecia la forma prismática únicamente en las células epiteliales de la hilera más superficial (flecha roja), con núcleos alargados cuyo eje mayor es perpendicular al plano de la membrana basal. Este epitelio prismático estratificado consta por lo general de dos capas celulares y las células de la capa situada basalmente (flecha azul) son cuboideas, con núcleos redondeados. (Tejido conjuntivo: C).
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